🏋🏼♀️ Mitos sobre la raza y el deporte, efecto placebo y más
.
🌱 Medio ambiente | 📡 Tecnología | 💊 Salud y medicina | 👫 Sociedad
👫 Mitos y verdades sobre la raza y el deporte
Por Irene Martínez-Morata
Imagen: Simone Biles en las Olimpiadas. Fuente: The Mercury News
Las claves
Durante décadas, diferencias en el rendimiento deportivo se han atribuido a diferencias raciales, con ideas como “los africanos están genéticamente predispuestos a correr más rápido que los europeos” ampliamente difundidas en la sociedad.
Sin embargo, estudios genómicos modernos demuestran que no hay marcadores genéticos que distingan claramente entre las razas de forma biológica.
La participación afroamericana en deportes como el baloncesto se explica por factores sociales y económicos, como la accesibilidad y los recursos, así como su popularidad en zonas urbanas. Por el contrario, la natación y el esquí utilizan músculos similares al baloncesto, pero son más populares entre deportistas blancos.
El rendimiento atlético de un individuo está influenciado por más de 120 marcadores genéticos diferentes encontrados en todo el mundo, y por una amplia gama de factores ambientales y culturales que no pueden explicarse por los rasgos raciales.
La raza es una construcción social
El concepto de “raza biológica” se desarrolló en los siglos XVII y XVIII, influenciado por la colonización y la esclavitud para justificar desigualdades y jerarquías sociales. Esta influencia llega hasta la actualidad.
La idea de raza biológica nace como instrumento para segregar la sociedad, pero no está respaldado por la evidencia científica.
Por ejemplo, el 85-90% de la variación genética ocurre entre individuos de la misma raza. Es decir, la variación genética entre dos europeos puede ser mayor que entre una persona europea y una persona asiática o africana.
Las diferencias en características como el color de la piel son adaptaciones a diferentes ambientes, no indicativos de subespecies o razas.
Los expertos añaden que no existen subgrupos humanos que hayan estado aislados el tiempo suficiente para desarrollar razas biológicas distintas.
💡¿Sabías qué?
Además de los relacionados con el deporte, otros mitos raciales incluyen las diferencias en el cociente intelectual entre personas asiáticas y europeas o la mayor susceptibilidad a enfermedades entre las personas afro-descendientes. Estos mitos han sido desmontados por la ciencia, pese a que aún persisten estas creencias en la sociedad.
💊 ¿Por qué los placebos disminuyen el dolor?
Por Arce Domingo
Las claves
Neurocientíficos han identificado circuitos cerebrales en ratones que podrían ayudar a explicar cómo los tratamientos simulados (placebos) pueden aliviar el dolor.
Tras proporcionar placebos a ratones que esperaban un alivio del dolor, los científicos observaron actividad en el cerebelo y el tronco encefálico, partes del cerebro tradicionalmente más asociadas al movimiento y la coordinación que a la percepción del dolor.
El 65% de las neuronas que se activaron en los ratones tras el efecto placebo tenía receptores opioides, que responden a compuestos analgésicos que fabrica el propio cuerpo, y que también son activados por fármacos analgésicos potentes.
Los científicos creen que estos hallazgos podrían revelar nuevas formas de tratar el dolor, y potenciar el descubrimiento de fármacos completamente novedosos.
Aún quedan interrogantes sobre qué activa el efecto placebo, por qué se produce en unos individuos y no en otros, y por qué desaparece con el tiempo.
Nuevo horizonte para los tratamientos del dolor
A partir de estos hallazgos, la ciencia podría estudiar cómo activar el circuito neuronal del tronco encefálico y el cerebelo sin depender de pastillas.
Se podrían investigar formas de activar los mecanismos de control del propio cuerpo que pueden suprimir la sensación de dolor.
Comprender los circuitos cerebrales implicados también podría arrojar luz sobre por qué algunos tratamientos del dolor, como las terapias cognitivo-conductuales y la estimulación magnética transcraneal, funcionan realmente.
💡¿Sabías qué?
Las empresas farmacéuticas están teniendo dificultades para conseguir que nuevos tratamientos para calmar el dolor superen los ensayos clínicos. La respuesta a los placebos se ha intensificado con el tiempo, lo que hace más difícil demostrar la ventaja de un fármaco sobre el placebo. En los últimos diez años, más del 90% de los fármacos potenciales para el tratamiento del dolor neuropático y oncológico han fracasado en los ensayos clínicos. Este efecto es más notable en Estados Unidos, y algunos científicos apuntan a que la razón podría ser que la publicidad directa al consumidor de fármacos -permitida solo en Estados Unidos y Nueva Zelanda- haya aumentado las expectativas de la población sobre los beneficios de los medicamentos, creando efectos placebo más fuertes.
📡 El reciclaje de las baterías de litio es posible
Por Arce Domingo
Las claves
Científicos de la Universidad de Rice (Texas) han desarrollado un método innovador para reciclar baterías de iones de litio mediante una técnica de separación magnética.
La separación magnética utiliza un método llamado calentamiento Joule instantáneo sin disolventes. La técnica consiste en hacer pasar una corriente a través de un material moderadamente resistente para calentarlo rápidamente y transformarlo en otras sustancias.
Esta técnica purifica y separa eficazmente los materiales de las baterías, manteniendo su integridad estructural y funcionalidad.
Usando este método, fueron capaces de recuperar el 98% de los metales de la batería, manteniendo el valor de la estructura.
Las técnicas de reciclado convencionales requieren la descomposición de los materiales mediante procesos térmicos o químicos que consumen mucha energía, son costosos y tienen importantes repercusiones ambientales.
Con el auge de los coches eléctricos, encontrar formas de reciclar eficazmente estas baterías de litio es primordial para contribuir a una producción más ecológica.
¿Para qué sirven las baterías de litio?
Es una tecnología cada vez más popular por su ligereza, alta densidad energética y capacidad de recarga.
Se utilizan en aparatos electrónicos como ordenadores portátiles y teléfonos móviles, así como en vehículos eléctricos, como alternativa a los motores de combustión interna, que generan emisiones de carbono.
También se utilizan para almacenar la energía generada a partir de fuentes renovables como la solar y la eólica.
💡¿Sabías qué?
A pesar de las ventajas de las baterías de litio, presentan numerosos problemas ambientales. La extracción de litio provoca una gran degradación del suelo, destruyendo hábitats y provocando una importante pérdida de biodiversidad. En Australia, por ejemplo, supuso la tala de unas 350 hectáreas de vegetación autóctona, afectando a varias especies animales amenazadas. Además, la producción de una tonelada de litio requiere aproximadamente 2,2 millones de litros de agua, desviando los escasos recursos hídricos de la agricultura local y las comunidades indígenas de Bolivia, Argentina y Chile.
🌱 Los árboles también absorben metano
Por Irene Martínez-Morata
Las claves
El metano es un gas de efecto invernadero que ha contribuido alrededor de un 23% al calentamiento global desde el año 1750. Su concentración atmosférica, además, se ha triplicado.
Un nuevo estudio ha identificado que las superficies leñosas de los árboles son capaces de absorber metano, especialmente en regiones tropicales.
Usando escaneo láser terrestre, se estimó que entre 24.6 y 49.9 teragramos de metano podrían ser absorbidos anualmente por superficies leñosas en el planeta (esto equivale a aproximadamente el 50% de las emisiones de la ganadería, uno de los mayores contribuyentes a las emisiones de metano).
Los hallazgos recalcan la importancia de los bosques no solo como sumideros de dióxido de carbono (CO2), sino también de metano, ayudando a mitigar el cambio climático.
Metano versus CO2
Pese a que el metano es menos conocido como contaminante de efecto invernadero, este gas es 25 veces más efectivo que el dióxido de carbono en atrapar calor en la atmósfera durante un período de 100 años.
Sin embargo, el metano tiene una vida más corta en la atmósfera, de unos 12 años, frente al CO2, que puede perdurar durante décadas.
Esto hace que la reducción rápida de emisiones de metano pueda tener un efecto más inmediato en la mitigación del calentamiento global.
